top of page
Foto del escritorConsulta Psicológica La Florida

¿Qué causa la depresión?

Actualizado: 4 sept 2022



Cuando una persona experimenta una depresión, suele hacerse preguntas tales como “¿Por qué esto me está pasando a mí?” “¿A qué se debe que me sienta así?” “¿Qué hice para merecer esto?”. Estas preguntas sumadas al desconocimiento de la enfermedad y a la incertidumbre que genera el futuro, provocan en la persona confusión, ansiedad y aumenta los síntomas depresivos de quien la está padeciendo. Cabe mencionar que buscar explicaciones respecto a lo que nos pasa, es una conducta absolutamente normal en el ser humano. Algunas personas tratarán de encontrar respuesta para sus problemas en asuntos externos: “Esto me pasa porque estoy haciendo muchas cosas a la vez” o “haber perdido mi trabajo ha hecho que me desanime”; otras en cambio, atribuirán sus síntomas a causas internas: “esto me pasa por no valorarme como debo” o “Yo soy la culpable de lo que me ocurre”.

Lo cierto, es que no podemos decir con certeza cuales son las causas exactas que generan la depresión en una persona, lo que sí podemos afirmar con exactitud es que la depresión se genera por múltiples factores que interactúan en el desarrollo de esta.


Cuando nos damos cuenta de que los síntomas que estamos experimentando, han comenzado a afectar nuestro adecuado funcionamiento en distintas áreas de nuestra vida, como por ejemplo en la relación matrimonial, en lo académico o laboral, lo mejor que la persona puede hacer es buscar ayuda, seguir intentando buscar explicaciones por lo general no resultará beneficioso para la persona que padece una depresión y dichas interpretaciones pueden transformarse en verdaderos impedimentos en el proceso de recuperación.

Los múltiples factores que pudiesen desencadenar una depresión se han agrupado en tres categorías:

  • Factores Biológicos.

  • Factores psicológicos.

  • Factores ambientales.

Ninguno de estos factores en sí mismos tienen el poder de desarrollar una depresión de forma inmediata, sino que la gran mayoría de ellos irán preparando el camino para que un futuro pueda generarse una depresión. A estos factores se les llama: Factores de riesgo. Los factores de riesgo son eventos o situaciones que promueven un estado de vulnerabilidad en la persona. Por ejemplo, una persona cuyos padres han sufrido depresión, tienen mayor posibilidad a desarrollar una (lo que no quiere decir que la desarrollará, pero estará más propensa que otra persona que no tiene antecedentes familiares con la enfermedad); otro ejemplo, es la persona que en su infancia se vio sometida a malos tratos, padres alcohólicos o sucesos traumáticos. Estas personas tienen mayores posibilidades de desarrollar una depresión en el futuro.

Sin embargo, existen algunos eventos específicos que tienen el potencial de desencadenar una depresión al poco tiempo de acontecido dicho evento. A este tipo de eventos se les denomina factores gatillantes o precipitantes. Por ejemplo, una ruptura amorosa o un diagnóstico de enfermedad física. Sin embargo, que un factor sea gatillante dependerá de cada persona y como se conjugue su propia historia particular.

A continuación se describen algunos factores que pueden promover la aparición de una depresión:

Factores biológicos:

Tal vez hemos escuchado en variadas ocasiones que el cerebro funciona a través de la transmisión de una infinidad de señales bioeléctricas. El paso de información de una neurona a otra es posible a través de los neurotransmisores.


Existen muchas sustancias químicas en el cerebro que actúan como neurotransmisores, sin embargo, dos de ellas participan de manera directa en el desarrollo y mantenimiento de la depresión: La noradrenalina y la serotonina.


La noradrenalina es una hormona que participa de forma activa en la capacidad de focalizar la atención, en la mantención de nuestro estado de vigilia, además ejerce influencia en el buen funcionamiento de nuestro sistema cardiovascular, actúa en nuestra respuesta de lucha/huída, tiene un efecto positivo en la motivación, en el manejo del estrés, la agresividad y el deseo sexual. Por último, tiene un rol preponderante en la regulación del ánimo.


Por otra parte, la serotonina actúa como un importante regulador del humor, el sueño, el apetito, la temperatura corporal, el ritmo cardiaco y las funciones intelectuales.

Un ejemplo de depresión donde estas sustancias pueden verse afectadas, es la ocurrida en mujeres, después de un parto, más conocida como depresión Post Parto.

De todas formas, se ha encontrado que gran parte de pacientes depresivos presentan una disminución de ambas sustancias. Cuando la depresión es causada principalmente por factores biológicos, el tratamiento médico suele ser una alternativa efectiva para superar la crisis, no obstante, siempre es recomendable acompañarlo con un proceso psicoterapéutico que brinde certezas al paciente y que le permita prevenir recaídas.

Factores genéticos:

Estudios demuestran que las mujeres tienen mayor predisposición genética a desarrollar una depresión. Sin embargo, no es un padecimiento exclusivo de mujeres, algunos hombres también la padecen. De hecho, cualquier persona que tiene familiares o padres con depresión, tienen mayor riesgo a desarrollar una depresión en el algún momento de su vida.

Factores ambientales:

Ciertas situaciones o eventos especialmente complicados podrían favorecer la aparición de una depresión. Como mencionamos en el punto anterior, las mujeres tiene mayores probabilidades de desarrollar una depresión por factores genéticos, sin embargo, no tan solo por dicho factor sino también por razones sociales. A lo largo de la historia las mujeres se han visto sometidas a mayores situaciones de pobreza, por sueldos menores al de los hombres o por el impedimento de trabajar (por ejemplo, por el cuidado de los hijos). Otra razón, es que históricamente la mujer ha sido la responsable de cuidar de terceras personas, lo cual conlleva una carga emocional mayor a la que los hombres experimentan. Por último, la violencia de género también podría ser una de las razones a las cuales las mujeres se ven sometidas y que hacen que estas se vean más propensas al desarrollo de una depresión.

Otros factores:

El desarrollo de enfermedades crónicas puede favorecer la aparición de una depresión (cáncer, lupus, diabetes, etc).

La adicción o consumo desmedido de alcohol o drogas.

La falta de luz solar. Se ha comprobado que existen personas que sufren depresión en determinadas estaciones del año, especialmente en aquellas que existe un menor acceso a la luz.


20 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comentarii


bottom of page